Recuerdo aquellas voces que decían que solo te podías enamorar de una persona. Que mentirosas. Me di cuenta del engaño en el momento en el que toda voz quedó oculta por el sonido de la suya.
No sabia que se pudiese amar de tantas maneras, con tanto detalle, a tanto nivel. Pero el eco de su risa en mi cabeza, era medicina para mis males. Ahuyentaba mis temores. Ahora mataría por volver a escuchar esa voz todos los días. Que pena no haber podido demostrar en sus momentos el peso de sus ojos tatuado en mi corazón, que vacío esta ahora.
Ojalá un sólo acorde de mi guitarra hubiese sido suficiente para ser su razón de reir. Ojala mis ojos hubiesen brillado mas al verle, y le hubiesen dicho con amor, lo que ahora duele decir con llanto.
No existe marcha atrás, las circunstancias cambian, no hay dos momentos iguales. Él fue mi mejor momento, pero en mi peor circunstancia. Que pena no haber sabido expresarme en voz alta, que pena no haber sabido callar las voces.
Me gustaría volver a poder quitarle la razón para poder ver de nuevo como lucha por defender todo aquello en lo que cree, aun construido a base de suposiciones. Me gustaría volver a sentir el latido de su corazón acelerado al verme, pero exigir un amor no correspondido es imposible.
¿Como podía yo saber que esto acabaría así? No me preocupa la separación, me preocupa lo que ha venido con ella.
No había magia antes, no había manera de querer al mismo nivel. Creía que enamorar a quien quieres cuando no siente lo mismo era imposible; él me demostró lo contrario. Aprendí con todo detalle a conocerle, y fue lo peor que pude hacer. Aprendí a soportar sus defectos, porque sus virtudes eran mas grandes, y ahora vivo siendo esclava de rozar su pelo una vez más.
No tengo energía, la gasto en mantenerle a raya. Gasto la ilusión en evitar que sus recuerdos se cuelen tranquilos por mi mente, haciéndome perder el control de mis emociones.
Cada triste parte de mi, destina su felicidad en hacerme creer que no hubo suerte, que no era él, que habrá un siguiente. Me consume no intentar recuperarle, me consume querer no quererle. Y no fue el tiempo lo que no estuvo de nuestra parte, pero si es el que me mata cada noche torturándome silenciosamente, haciéndome creer que esta al otro lado, esperandome, cuando estoy sola en realidad.
Ya no solo vacía, si no rota. Pero la culpa no deja de golpearme, con toda la fuerza que malgasto en evitar pensar en el.
Él fue de todos, mi disco favorito, pero ahora, se mantiene en repetición constante, si que haya manera humana de apagarle.
Que mas que agradecerle haberme hecho sentir viva, y que mas que disculparme por no haber sabido decirle, que sin él, mi mundo terminaría.
https://m.youtube.com/watch?v=F6dlSUfZoNw